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Mapa del año 1490 |
Resumen de lo publicado. Los etruscos vivieron en Italia alrededor del año 900 a.C. pero se extinguieron.
Roma fue fundada en el 753 a.C. En 510 a.C., la nobleza romana proclamó una república. A partir del siglo II a.C., Roma se convirtió en un imperio, que se dividió en dos en el año 395. Roma, capital del imperio de occidente, fue invadida por los hérulos en el año 493: era el fin del imperio. Luego, fue controlada por los ostrogodos, el Imperio Bizantino, los lombardos (568-754) y los francos, que en el 774 la sumaron al Imperio Franco-Carolingio. Muchas regiones se fueron convirtiendo en
Estados Pontificios. En el siglo X, Italia estaba dividida: los musulmanes gobernaban en el sur; las ciudades independientes, el centro; los estados de la Iglesia, los alrededores de Roma; y los francos, el norte. El Imperio Franco-Carolingio se desaintegró y cedió sus dominios al Sacro Imperio Romano Germánico. Durante el siglo XII, el norte de Italia consiguió la independencia. Surgieron luchas internas que dividieron al país en estados: repúblicas de Florencia, Pisa, Génova, Venecia; ducados de Saboya y Milan; además de los estados pontificios, el reino de Nápoles y el de las dos Sicilias. En 1183, las ciudades italianas reconocieron su dependencia del Sacro Imperio a cambio de cierta autonomía. Tras la muerte de Federico II (1194-1250), el Imperio se debilitó, y Alemania y el sur de Italia sufrieron un período de anarquía llamado
interregno (1250-1308), en el que no hubo gobierno central y cada región se manejó de forma independiente. A finales del siglo XIII, la población italiana sufría una fuerte división entre los que apoyaban al partido güelfo y los que apoyaban al partido gibelino. Entre los inicios del siglo XIV y mediados del XV surgieron los "signori" o déspotas, hombres que gobernaban tomando decisiones de modo individual, muchas veces injustas o caprichosas. El desarrollo económico de los núcleos urbanos (lo que ahora serían pequeñas ciudades) aumentó las diferencias que existían entre la nobleza, la alta burguesía y los sectores populares.
¿Cómo sigue la historia? En el siglo XV, el actual territorio de Italia estaba dividido en las ciudades autónomas de Nápoles, Génova, Venecia y Florencia; el reino de Aragón; y los Estados Pontificios (controlados por la Iglesia). Además, una porción del norte era dominada por el Sacro Imperio Romano Germánico.
Luego de varios enfrentamientos para controlar el comercio de la región, Florencia, Milan y Venecia firmaron en 1454 el Tratado de Lodi, que logró un período de 40 años sin enfrentamientos.
Esa paz y la positiva situación económica fueron factores importantes para que Italia se convirtiera en el centro artístico y cultural de Europa, y la región en la que se originó la el movimiento cultural conocido como Renacimiento. Ese período de esplendor finalizó en el siglo XVI, por culpa de una serie de enfrentamientos armados conocido como las “guerras italianas” (1494-1559).
El reino de Aragón finalmente se convirtió en parte del Imperio de España, que avanzó sobre Italia, conquistando Nápoles (en 1504); mientras que el Sacro Imperio Romano Germánico tenía fuerte influencia sobre Venecia y Florencia. Por lo tanto, solamente Génova se mantenía como ciudad totalmente independiente de los extranjeros.
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